La sexualidad masculina

3. Es necesario que el hombre eyacule para estar satisfecho o es el objetivo de la sexualidad masculina 

Esta creencia sobre la sexualidad masculina está muy generalizada, pero solo necesitas preguntar a un hombre que sepa separar el orgasmo de la eyaculación para saber que el orgasmo sin eyaculación es posible y que además tiene muchísimos beneficios. Entre ellos, llegar a ser multiorgásmico, o mantener siempre constante la energía sexual de  la sexualidad masculina, el deseo, la confianza y la atracción. Aunque parezca raro, una vez que el hombre aprende a llegar al orgasmo sin eyacular, rara vez querrá volver a eyacular en todo momento.

La mayoría de las mujeres llegan al orgasmo muchas veces sin eyacular. Esto suele pasar porque se averguenzan de permitir la eyaculación, o porque sus parejas no han sabido excitarlas lo suficiente hasta el punto de llegar a eyacular. Por lo tanto, una mujer sabe perfectamente que la eyaculación y el orgasmo no son lo mismo. Con todo esto no quiero decir que el hombre tenga que avergonzarse de su eyaculación, sino sepa que tiene más opciones.

4. La erección es necesaria para poder disfrutar de juegos sexuales.

Esto sobre la sexualidad masculina es también es falso. ¿Por qué? Por un lado, a la mayoría de las mujeres les gustan más los «preliminares» incluso sin llegar a tener relaciones sexuales. De hecho, algunas mujeres los prefieren directamente sin tener que llegar al coito y los suelen disfrutar más cuando no se hacen solo para poder llegar al coito lo más rápido posible. Los hombres tienden a igualar el sexo y el coito, pero en realidad no saben que pueden llegar a excitarse muchísimo más que solo con sus órganos reproductores… Los juegos previos no requieren una erección, y el proceso de despertar y sentir la excitación de la otra persona puede llegar a ser muy placentero, e incluso estimular una erección.

Además, un pene que no esté erecto del todo puede ser más sensible a las sensaciones sutiles y menos impulsado a buscar la liberación. Esto permite a los hombres aumentar su capacidad de experimentar y disfrutar sensaciones eróticas en todo su cuerpo y de controlar más la energía erótica que puede llegar a ser compartida con un compañero, tanto con penetración como sin ella.

5. Mientras más grande sea el pene, mejor. 

El gran mito de la sexualidad masculina. El único barómetro real es la compatibilidad. Por ejemplo, un pene grande y una vagina pequeña nunca va a ser una buena combinación, y sobre todo, después de la menopausia. Además, a pesar de todo lo que se dice, lo más importante es saber como utilizar el pene y no su tamaño. Y afortunadamente, esto se puede aprender. Tener un pene más pequeño permite movimientos más fáciles y puede motivar al hombre a explorar una variedad de formas para complacer a su amante.

El principal problema de tener un pene más pequeño es que el propio hombre piensa que no es lo suficientemente bueno y puede afectar a la hora de las relaciones sexuales. El tema del tamaño suele preocupar a muchísimos hombres, incluso cuando su pene es más grande que el promedio. Y muchas veces esto hace que se creen inseguridades en las dos personas por lo que las relaciones sexuales nunca llegarán a ser placenteras del todo. ¡No os dejeis engañar, chicos!

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Como disfrutar del Punto P, aquí.

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