Beneficios del masaje erótico
Límites saludables
La gente suele ver los límites saludables como muros y estos, realmente, son puentes que unen personas. La intimidad se llega a alcanzar cuando se honran dichos límites. Una vez que haces esto, te sientes más seguro y abierto a todo. Estos límites pueden cambiar, por lo que debes estar pendiente de vez en cuando para poder controlar tu estado tanto de ánimo como de salud. Si sientes que tu límite ha cambiado, cuéntaselo a tu pareja de inmediato porque él no va a leerte la mente.
Dar un masaje erótico
Primero hay que decidir quién da el masaje y quien lo recibe. El receptor debe ponerse boca abajo sobre una mesa de masaje, una cama o una manta en el suelo. ¡Asegúrate de que sean cómodas! El que da el masaje debe ponerse hacia abajo, y, suavemente, colocar sus manos en el cuerpo de su pareja. Es una oportunidad única de honrar y de hacer sentir bien a la otra persona. Busca la armonía en él. Una buena forma para hacerlo puede ser respirar juntos durante unos minutos.
Una vez que hayáis conseguido esto, debes despertar la piel de tu compañero. Para ello, acaríciala ligeramente con plumas, pelo o con las yemas de los dedos. Cuando esté listo, cubre todo su cuerpo con aceite. Para dar el masaje , haz movimientos largos y lentos. No solo estás masajeando el cuerpo de tu pareja, sino que estás conectando con ella en muchos más sentidos de lo que te imaginas. Anímale a respirar profundamente, a hacer sonidos y a mover su cuerpo. Esto permite que la energía del cuerpo se despierte, se mueva y se libere. No utilices solo las manos para hacer el masaje, te sorprenderás de lo placentero que puede llegar a ser el uso de otras partes del cuerpo como el cabello, los brazos o el pecho. Sé juguetón, curioso y creativo.
Cuando llevéis más o menos la mitad del tiempo del masaje, pídele a tu compañero que se de la vuelta. Comienza a masajear la parte frontal de su cuerpo, de nuevo, con aceite y con movimientos largos. Introduce el sonido mientras tocas su cuerpo, puedes hacer sonidos como ahh, uhmm u ohmm. Hacer esto sirve para activar el cuerpo energético de tu pareja.
Cuando esté tranquilo y preparado ofrecele explorar sus genitales. En el Tantra, llamamos a los órganos sexuales de maneras diferentes: a la la vagina la llamamos «Yoni», que significa «Matriz Cósmica» y al pene, «Vajra», que significa «Rayo». Comienza a masajear el exterior de los geniatales con aceite. Al principio, sé dulce y hazlo lentamente. Dale tiempo para que pueda liberar cualquier tensión en esa zona. Escucha a su cuerpo. Observa su respuesta y disfruta de cómo se excita. Céntrate solamente en darle el máximo placer posible y, para ello, prueba a hacer diferentes movimientos. No dejes de ser creativo y probar cosas distintas. Si vas a hacer también el masaje interno, utiliza lubricante a base de agua.
¿Cuál es el límite del placer? ¿Estás dispuesto a explorar la posibilidad de tener orgasmos múltiples?
Para terminar, poneos en posición de cucharita y conectad vuestros corazones con amor, compasión y gratitud. Ayúda a tu pareja a sentarse para terminar con la postura del Saludo de corazón. Una vez que hayáis acabado, tráele algo de beber (puede ser agua o zumo) y, también, para comer (un pedazo de chocholate o una pieza de fruta).
Cuando lo pruebes, puedes compartir lo que esta experiencia te ha hecho sentir. ¿Qué te suspuso dar y / o recibir y viceversa?
¡Disfrútalo!
Descubre un poco de historia sobre el masaje erótico con nuestro post «Masajes eróticos: historia»https://masajistagaymadrid.com/masajes-eroticos-historia/
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